LAS NOCHES DEL RESCATADOR I

Corría el año 1.998, 14 de agosto a las 11.30 horas de la noche. Estoy con unos amigos tomando unas cañitas en una terraza de verano, pasando el madrileño calor estival de la mejor manera posible.
Las noches del Rescatador I 1
Suena el buscapersonas. Emergencia en Protección Civil de Majadahonda. En un instante estoy en un teléfono. Es el jefe de Protección Civil de Majadahonda. Se ha perdido un señor mayor en un pueblo de la Sierra de Madrid. Está aquejado de Alzheimer, salió esta mañana en un descuido de su hija y llevan todo el día buscándole. No aparece, han llamado a Protección Civil para que vayamos con los perros de Búsqueda y Rescate de personas en catástrofes. Llamo a todos mis efectivos. Son fechas vacacionales y no estamos todos, pero somos suficientes.

Seis de la mañana del 15 de agosto. Con las luces de los coches de la Guardia Civil y la Policía Local, sobre unos planos me enseñan la zona en la que estamos para comenzar la búsqueda con las primeras luces del día.

Empieza a amanecer, entre luces y sombras podemos ver la estructura del terreno. Monte bajo, jaras, chaparros y encinas, todo ello en bastante densidad. Será una búsqueda difícil. Entre tanta vegetación es fácil pasar muy cerca de alguien y no verlo.

Distribuyo a mis hombres, son cinco equipos cinológicos, cada uno de ellos se compone de un guía con su perro. En este tipo de terreno nos vienen muy bien los dos ejemplares de Perro de Agua Español de que disponemos, pues por su tamaño, pueden meterse entre la vegetación con una gran facilidad, y su carácter vigoroso e inquieto les hace trabajar incansablemente pese al calor que pronto comenzó a caer sobre nosotros.

La parte más cercana a la casa donde vive la familia del desaparecido, donde estaba el señor en el momento de perderse, está a unos 50 metros de la estación de Renfe. Hacia el interior del pueblo no podía haber ido, en el pueblo lo conoce todo el mundo y nadie lo ha visto. Solo pudo ir hacia el monte donde nos encontramos, separado por las edificaciones por las vías del tren.

Reparto las zonas entre mis colaboradores y comienza la búsqueda. Las zonas que he asignado a cada uno de los equipos son más bien pequeñas, hay que ir eliminando zonas y buscando en otras nuevas porque debido a la estructura del terreno no puedo asignar zonas más grandes ya que no hay la visibilidad suficiente, debido a la vegetación, como para tener un buen control visual de cada zona.
Las noches del Rescatador I 2
Las doce de la mañana. El sol en lo alto, el calor es bastante intenso. Cada vez que un guía con su perro termina una zona vienen al puesto de mando, donde estamos la Guardia Civil con sus motos de montaña, la Policía Local y yo con mi ayudante de comunicaciones, pues en cada momento estamos en contacto con cada uno de los guías por walky talky.

Hasta el momento no hay ni rastro del desaparecido. Cada vez que uno de mis hombres termina una zona viene, me da novedades beben agua, descansan cinco o diez minutos y le asigno una zona nueva. No hay tiempo para descansar más, hay una persona mayor perdida y puede ser cuestión de horas, quizás minutos que la encontremos en unas u otras condiciones.

Continuara…….

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